sábado, 19 de mayo de 2007

Mar adentro

"and I'm not frightened of dying, any time will do, I don't mind...
why should I be frightened of dying,
there's no reason for it, you've gotta go sometime..."
"I never said I was frightened of dying"

The great gig in the sky - Pink Floyd

Nunca pensé que algún día me iba a encontrar tan cerca de la muerte y mucho menos cómo reaccionaría al estarlo. Creo que no era momento de irme. Tengo aún varias cosas por hacer y decir...

La semana pasada fui a la playa con mi familia y unos amigos, a barra vieja, mar abierto, como a una hora al sur de acapulco. Es muy rico estar ahí porque la playa es grande y hay poca gente. Las olas son fuertes pero se puede estar agusto no muy adentro, disfrutando del abrazo del mar.

Mi papá había pedido que para la tarde me prepararan unos camarones al mojo de ajo. Le había comentado que quería saborearmelos con una cerveza bien fría, enterrando los pies en la arena y observando el mar.

Jugar futbol cerca de una hora en la playa es agotador y nada mejor que refrescarse en el mar. Caminé hacía él sumergiéndome en cada ola que llegaba. Me había alejado un poco del lugar de donde estabamos así es que salí y regresé caminando. Volví a entrar pero ahora me dirigí hacia el lado contrario. De igual manera entré sumergiéndome en cada ola. Después de un rato sin tocar la arena intenté nadar de regreso a la playa. Me di cuenta que por más que nadaba, en vez de ir hacía afuera me alejaba más. Fue entonces cuando le grité a un primo que ya me había cansado y no podía seguir nadando. Cada vez iba más adentro. Había agarrado una corriente que me estaba alejando de la playa.

Por más que nadara no iba a poder salir. Gritos y más gritos de desesperación, de aqui estoy, de ya no puedo nadar. Nadie entraba pues nadie sabía cómo sacar una persona del mar. La desesperación pasó cuando me di cuenta que así me agotaba más, cada vez que intentaba nadar me iba más adentro y al terminar de dar las brazadas terminaba agotado y me hundía por un momento para después salir. Entonces decidí usar mi energía restante para flotar.

Al voltear y no ver nada ni nadie cerca comence a pensar en que no iba a salir, estaba siendo realista, me iba a hundir e iba a ser poco más de un minuto de agonía para después descansar en el mar. Era una clase de resignación, no religiosa pues jamás pensé en un dios que me salvara. Más bien pensaba en mis padres, mis hermanos, mi demás familia, su sufrimiento, su impotencia de no poder ir por mi. Los veía desde adentro, todos en la playa queriendo meterse a sacarme. Cómo decirles que me encontraba bien, cómo decirles que no había problema si me quedaba en el mar, cómo decirles que los amo, cómo decirles que no estuvieran tristes por mi... no había forma.

Después de un rato entraron dos tipos nadando. Cuando los vi entonces supe que tenía que esperar un poco más. Fue cuando llegó la tranquilidad a mi. Llegaron más rápido de lo que pensé. El primero se detuvo a dos metros de mi mientras el que venía atrás le gritaba que no me fuera a agarrar. Cuando llegó el segundo me pidieron que nadara hacia ellos, les dije que ya no podía, que solo tenía fuerza para mantenerme a flote. Cuando vieron que no estaba tan desesperado fue cuando me tomaron uno de cada mano. Me pidieron que pataleara y fueron jalándome. No nadamos directamente a la playa. Tuvieron que llevarme más atras para salir por otra parte donde la corriente nos llevara hacia ella. Al tocar la arena los primeros en recibirme fueron mi papá y mi tía, después llegó mi mamá y mi demás familia a abrazarme. Yo salí blaaancoo!!!

Me espanté y desesperé, no lo niego, pero jamás creí que pensaría en morirme. Jamás dejé de luchar, pero estaba seguro que ahí me iba a quedar. Y no fue así... aún tenía muchas cosas por hacer y decir. Decirle a mis padres que los amo y les agradezco por darme la vida y permitirme crecer sin imposiciones. A mis hermanos, a mis tíos, a mis primos que también los amo. A mis amigos que han formado parte de mi segunda familia. Aún me faltaba saborearme los camarones al mojo de ajo con una cerveza bien fría, enterrando los pies en la arena, observando el mar que quería que formara parte de él. Aún me falta decirle a esa niña que me encanta. Aún estoy aquí para vivir.

guatsa steppenwolf

9 comentarios:

Anónimo dijo...

como te supieron tus camarones?
te acuerdas de esa escena de fight club piensa que todavia te falta estar con todos los engranes reockeando en puebla !!!
saludos carnal, tu entrada muy estremecedora pero tambien muy humana, no me imagino que haria yo !!! un abrazo carnal !!!

Oxcar Engrane

Guatsa Steppenwolf dijo...

Mis familiares no me dejaron comer ni tomar nada durante un buen rato. Esto, según ellos, porque después del susto se pueden desatar algunas enfermedades.

Pero después mi padrino me dio una chela que me supo a gloria... ya cuando llegaron los camarones (que no fueron al mojo de ajo sino a la diabla, pero no me importó) los disfruté como tenía planeado.

Por supuesto que me falta rockear más con los hermanos de engrane y si hay chance, seguro nos vamos a puebla.

Un abrazo con pura buena vibra!!!

Anónimo dijo...

Hola,, esperO que ya estes bien ??
sabes que te quiero muchooo y que eres uno de los primos que más quiero!!!
Cuidateme mucho!!
te Quiero muchoo!!

Guatsa Steppenwolf dijo...

primita hermosa, yo también te quiero mucho...

Claro que me encuentro bien... me encuentro mejor, me encuentro contento con la vida.

Tú también cuídate mucho.

Te adoro pachacata mugrosa =D

Cleik dijo...

Hay Hay, no se enamoreeen.
Chinga pinche guatsa, no mencionaste que entre mas nadabas mas te ibas padentro.

Por cierto aqui las incognitas a resolver son:
- ¿como es que los salvavidas te vieron?
- ¿Porque uno le dijo al otro, que no te agarraran? ¿Les diste asco?
- ¿Dios Existe?
- ¿Al mar tambien le diste asco?
- Podrias comer esos camarones en Playa Ebrard??

Guatsa Steppenwolf dijo...

Pinche cleik, en vez de que me des la bienvenida... ya me iba a quedar ahí wey, y no había hecho aún mi testamento xD.

Van las respuestas a las incognitas planteadas.

-Un tío le habló a unos chavos que rentaban sus cuatrimotos y les pidió que me sacaran.

-Pues como estaba blaaancooo, han de haber pensado que era un fantasma... Ps no ves que cuando alguién se está ahogando está desesperado y lo primero que haces es treparte en lo primero que ves, y si eso es el wey que te iba a sacar ps nomás lo ahogas también.

-Por poquito se ahogaba ><

-El mar se dio cuenta que aún soy útil en este mundo, aunque sea de mal ejemplo pero para algo he de servir.

-Pues chance y me podía comer los camarones, aunque no tan frescos, pero nomás enterraba los piés 5 cm y ya me rasparía el piso xD

Unknown dijo...

Hola Dani
Que bueno que viste el valor de la serenidad.

Anónimo dijo...

Canijo brato, ni con la bolla que traes pegada pudiste relajarte y dejarte flotar. ¿Que tal dormiste esa noche?
¿Al despertar no te pasó por la mente, que ya habías muerto y esta era otra vida?

Guatsa Steppenwolf dijo...

Pues esa noche no dormí brato... me fui con mis primos a disfrutar de la brisa marina en un antro en la playa... y, sobre la otra vida... creo que ya he vivido en ella.